El espacio central de esta residencia se estructura en torno a las áreas comunes, las cuales conforman un único entorno abierto en doble altura que incluye el acceso, la sala de estar y un espacio dedicado a la lectura. Los ventanales en el salón y la cocina facilitan la conexión entre el interior y el exterior de la vivienda, brindando una sensación de amplitud desde el interior con vistas al patio y la piscina.
En cuanto a la eficiencia energética, la vivienda implementa diversas estrategias pasivas. Se destaca un alto nivel de aislamiento en toda la envolvente, con un sistema SATE en la fachada que minimiza los puentes térmicos y ventanas según orientación. Estas medidas contribuyen a optimizar el confort térmico y a reducir el consumo energético.
Además, la vivienda cuenta con un sistema de climatización eficiente mediante aerotermia y suelo radiante. Asimismo, se ha incorporado un sistema de ventilación con recuperación de calor, que no solo mejora la eficiencia térmica de la vivienda, sino que también contribuye a mantener una alta calidad del aire interior.